Desde que tienen derecho al voto están lucías. Ahora las mujeres trabajan tanto como los hombres quizá hasta más. Se creen la gran jodienda y no tengo problema con eso. Pero ya que nosotros los hombres somos superiores, me siento en libertad de darles algunas instrucciones y algunos hints para que se superen y logren vivir la vida a plenitud. Primero. Por favor, no le digan “jefe” a alguien que no es el real jefe de ustedes. Eso de decir “jefe dame unos NewpoL 100’s y quince pesos en la 9″ como que no era la manera correcta de referirse al empleado de la gasolinera. Les quita finura, y ningún hombre quiere que una mujer no-fina le lacte el bicho. Segunda instrucción: si están haciendo un tiro en la mesa de billar, porfavor pongan el cigarrillo en el borde de la mesa. ¡Me encanta cuando hacen tiros con el cigarrillo en boca y con un ojo medio cerrado para que el humo no les joda! Se ven feas y puercas. Y ningún hombre quiere venírsele en la cara a una mujer fea y puerca. Tercero: no escupan. Escupir es para la gente sucia. Osea, para los hombres puñeta. Ustedes, quédense con su flemita adentro, donde pertenece. Esta instrucción tiene las siguiente excepciones: pueden escupir los chicles y pueden también escupir su saliva encima del bicho mio porque eso de escupir bicho está bien nítido y entiendo que más mujeres lo deberían de intentar.